viernes, 11 de abril de 2008

Conciencia de la vida

Activarnos para salvarnos

Hay un mal que está atacando a nuestra sociedad que crece cada día más y aunque siempre existió en los últimos años asusta y preocupa al mismo tiempo. Lo que sería bueno, es que aparte de asustarnos nos lleve a la acción, acción verdadera, que nos haga cambiar las cosas.
El tema es el de los accidentes de tránsito, ya no los llamaría accidentes sino “negligencia de tránsito” en la mayoría de los casos. Es un hecho, una realidad que nos afecta a todos, al que maneja y al que no, al que le gusta viajar como al que no.
Me animo a decir que el problema de fondo es la falta de respeto y de amor hacia la vida lo que se deja ver en este problema. Si abrimos el juego para descubrir cuál es en realidad el fondo, creo que se vislumbra una verdad: no amamos la vida, por lo tanto no la cuidamos.
No existe una verdadera conciencia de lo bello que es vivir para así poder cuidarla y también cuidar la de los demás. Es un desafío en el mundo de hoy, amar la vida, respetarla bajo todos sus símbolos.
Respetarla la vida sería también encontrar la diferencia entre mi libertad y la del otro. Uno puede amar la vida o no importarle morir y puede decidir quitársela con pastillas u otros métodos, pero no en el auto, camión o colectivo, no en la ciudad o en la ruta, donde no sólo pongo en peligro mi vida, sino también de los otros.
No creo en el “destino”, no creo en el “tenía que pasar” o en el “Dios lo quiso así”. Éstas son grandes mentiras. Manejar en la ruta a 150 Km. de velocidad, hablar por celular o escribir mensajes mientras se maneja, pasar a otro vehículo sin visión suficiente y otras tantas cosas es buscar la muerte y no tiene nada que ver con el destino.
No caigamos en tener una mente subdesarrollada, una mente que no es conciente de los verdaderos peligros y de lo que puede pasar sino cuidamos la vida, podemos aportar algo para que esto cambie, entre todos, depende de cada uno y de todos.

jueves, 27 de marzo de 2008

¿Quién aplaude a Cristina?

¿El que la votó? ¿El que creía que esta mujer podía gobernar? ¿Podría seguir beneficiando a los ricos? ¿-Otra vez las cacerolas?
El país se enfrenta, ricos y pobres, una brecha que cada día se abre más en esta tierra Argentina.
Los distintos grupos se enfrentan, camioneros y agropecuarios, turistas y piqueteros, pasajeros, trabajadores con los del campo. Y me vuelvo a preguntar ¿quién voto a Cristina? Hoy todos nos quejamos y lamentamos, le dan a a la “presidenta” unos pocos días más en la Casa Rosada, pero el problema es previo aún. ¿Cómo votamos? ¿Con qué criterio seguimos eligiendo a los gobernantes? ¿Por qué permitimos que se continúe un feudalismo? ¿Por qué no se apostó al cambio? Hace cuatro meses teníamos la posibilidad de cambiar y elegimos seguir, seguir igual o peor.
Hoy los mismos que hacen el paro son los que votaron a Cristina, los mismo que se quedan en la ruta son los que le pusieron el voto.
Nadie sabe como continúa esta historia, pobre Argentina, un país que tiene todo para crecer y progresar hoy está dividido, enfrentado, enojado, en lucha.
Pobre Argentina en donde los argentinos nunca aprendemos, no tenemos historia, o mejor dicho no tenemos memoria y por eso no recordamos al momento de votar, para poder cambiar.

viernes, 7 de marzo de 2008

Bienvenidos!

Espero que puedan disfrutar de este blog, que tiene la intención de abrir una puerta en la comunicación de hoy.

Aqui podrán encontrar, artículos que deseo compartir sobre acontecimientos actuales, pero desde una mirada más crítica, y a veces desde una mirada de esperanza.

Un blog es una herramienta que nos permite esta interacción, nos permite comunicarnos e intercambiar ideas, opiniones, búsquedas, y porque no, sueños.

Les agradezco desde ya que se sumen a esta propuesta y espero comentarios!

Un abrazo con cariño,

Soledad Quiroga

Lic. en Comunicación Social